Archivo | marzo 2012

Todo es posible si entrenamos la mente…

“Los maestros de meditación budistas saben cuan flexible y maleable es la mente. Todo es posible si la entrenamos. De hecho, ya estamos perfectamente entrenados para tener celos, para aferrarnos, para estar angustiados y tristes, desesperados y anhelantes, entrenados para reaccionar coléricamente contra aquello que nos provoca. En realidad estamos entrenados en tal medida que estas emociones negativas surgen espontáneamente, sin que intentemos siquiera generarlas.

Así pues, todo depende de la fuerza del hábito y del entrenamiento. Si consagramos la mente a la confusión, sabemos muy bien que se convertirá en una sombría maestra de confusión, experta en adicciones, sutil y perversamente elástica en sus esclavitudes. Consagrémosla a la tarea de liberarse ella misma del engaño y descubriremos que con tiempo, paciencia, disciplina y un entrenamiento adecuado, nuestra mente empezará a deshacer sus propios nudos.

Lleva la mente a casa, vuelve la mente hacia el interior y derrámala
como granos en una superficie plana:
cada pensamiento y emoción es un grano
que se asienta por su propia cuenta.”

 

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Yendo de la cabeza al corazón.

Cambia de pensar a sentir. Y la mejor manera es empezar a respirar desde el corazón. Durante el día, siempre que te acuerdes, inhala profundamente; siente cómo te golpea justo en el medio del pecho.
Siente cómo toda la existencia está entrando a raudales en ti. en tu corazón, exactamente en el medio, ni a la izquierda ni a la derecha…, exactamente en el medio. Ahí es donde está tu centro del corazón. No tiene nada que ver con el corazón físico. Es algo totalmente diferente; pertenece al cuerpo sutil.

Respira profundamente y, siempre que lo hagas, hazlo por lo menos cinco veces, una respiración profunda; inspira, llena el corazón. Siente que está en el medio, que la existencia se está vertiendo a raudales en ti a través del corazón: vitalidad, vida, divinidad, naturaleza…, vertiéndolo todo. Y entonces exhala profundamente, otra vez desde el corazón, y siente que estás vertiendo nuevamente, a la existencia, todo lo que se te ha dado. Hazlo muchas veces al día. Y te volverás cada vez más sensible, más consciente de muchas cosas. Olerás más, saborearás más las cosas, tocarás más. Verás más, oirás más; todo se volverá más intenso. Empezarás a sentir la vida latiendo de verdad en tu interior.

-Osho.

‘Los defectos que vemos en los demás son los que nosotros mismos tenemos’

‘Los defectos que vemos en los demás son los que nosotros mismos tenemos’. Si queremos saber cómo somos o cómo es alguien en su interior, veamos a quién criticamos, en quién ponemos la mente, de quién nos ocupamos, y que somos igual a eso. Tu propio estado de consciencia es lo que ves en ti, en los demás y en lo que te rodea. No aceptes ningún decreto negativo de nadie; quítale poder con tu mente. Eso se puede hacer. Haz la prueba y verás.

Mamá Norita decía: «Para decir que eres bueno no hace falta decir que los demás son malos». Parafraseándola, diría: «Para decir lo bueno, no hace falta decir lo malo»; di lo que es bueno, y lo malo desaparecerá. No hay que personalizar la energía negativa; si la comentas o la escribes, te la chupas. Si tú te transformas, puedes transformar el mundo; si no te transformas, no puedes transformar a nadie. No le digas a nadie cómo tiene que ser, ni lo que debe hacer, ni quién es malo. Sé tú bueno, habla bien, y verás que todo se compone.

Del libro: «ESPIRITUALIDAD DINÁMICA» de Rubén Cedeño

 

Meditación Nataraj.

EL NATARAJ es usar el baile como una meditación total. Tiene tres etapas con una duración total de 65 minutos. Olvídate del que está bailando, del centro del ego. Hazte uno con la danza. Eso es la meditación. Baila tan profundamente que te olvides completamente de que estás bailando, y comienza a sentir que eres el baile. La división debe desaparecer. Entonces se convierte en meditación. Si la división persiste, entonces sólo es un ejercicio: bueno, saludable, pero no se puede decir que sea espiritual. Es simplemente un baile. El baile es bueno en sí mismo. Mientras bailas, está bien.

Después de bailar, te sentirás renovado, rejuvenecido. Pero todavía no es meditación. El bailarín debe desaparecer, hasta que sólo quede el baile. Sé total cuando bailes, porque la división sólo puede existir si no eres total. Si te quedas a un lado mirando tu propia danza, la división permanecerá: tú eres el bailarín y estás bailando. El baile es sólo un acto, algo que estás haciendo. No es tu ser. Por eso implícate totalmente: sumérgete. No te quedes a un lado, no seas un observador. ¡Participa!

Deja que el baile fluya espontáneamente; no lo fuerces. Mejor, sigúelo: permite que suceda. No es algo que tú hagas, es un suceder. Mantén una actitud festiva. No estás haciendo nada serio; sólo estás jugando, jugando con tu energía vital, jugando con tu bioenergía, dejando que se mueva espontáneamente. Al igual que el viento sopla y que el río fluye, tú estás fluyendo y volando. Siéntelo.

Primera etapa: 40 minutos.
Con los ojos cerrados, baila como un poseer. Deja que tu inconsciente te posea completamente. No controles tus movimientos ni seas testigo de lo que está ocurriendo. Sólo sé total en el baile.

Segunda etapa: 20 minutos.
Manteniendo los ojos cerrados, túmbate inmediatamente. Permanece callado e inmóvil.

Tercera etapa: 5 minutos. Baila en celebración y disfruta.

-Osho.

 

♥TU Y YO♥ – RICKY MARTIN

 

Que loco amanecer
Mordiendo tu sonrisa
Y amarte hasta caer
Perdido en tus caricias…

Que bello atardecer
Sudando entre las sabanas
Volverte a recorrer
Jugando con malicia…

Embrujados, encendidos
Indescentes, escondidos
Mis manos como garras
Se han prendido de tu piel

Prisioneros de la luna
Re-inventando la locura
Entre gritos y dulzura
Tu y Yo…
Los momentos sin medida
Devorandonos la vida
Enredados noche y dia
Tu y Yo… tu y yo… tu y yo… tu y yo…

Que magico es dormir
Al borde de tu cuerpo
Saber k estas ahi
Dibujandome los sueños…

Y al despertar morir
Prendido a tu belleza
Llorar hasta reir
Burlando la tristeza…

Embrujados, encendidos
Indescentes, escondidos
Tus labios insolentes y atrevidos
Piden mas…

Prisioneros de la luna
Re-inventando la locura
Entre gritos y dulzura
Tu y Yo…
Los momentos sin medida
Devorandonos la vida
Enredados noche y dia
Tu y Yo… tu y yo… tu y yo… tu y yo…

Dame la sed que el agua no apaga
Dame la sal que el mar se robo
Bebe de mi boca desesperada
Dejame bañarte con mi sudor
Dame la furia de tu mirada
Dame el veneno de tu pasion
Deja tu perfume sobre mi almohada
Para respirar de tu olor…

Prisioneros de la luna
Re-inventando la locura
Entre gritos y dulzura
Tu y Yo…
Los momentos sin medida
Devorandonos la vida
Enredados noche y dia
Tu y Yo… tu y yo… tu y yo… tu y yo…
Tu y Yo… tu y yo… tu y yo… tu y yo…

Tu Y Yoooooooo…

Ahhhhhhhhh…